Las ciudades se expanden día a día y, a causa de este crecimiento, es habitual encontrarse con centros urbanos congestionados por el tráfico, con falta de plazas de estacionamiento y altos niveles de contaminación ambiental si no se toman medidas. Desde hace años, grandes urbes han empezado a adoptar una visión más integral de la movilidad urbana, optimizando entre otras cosas el uso de los espacios disponibles mediante soluciones de guiado inteligente capaces de reducir el tiempo de búsqueda de aparcamiento y la frustración que esto puede llegar a generar en los conductores.
Esta transición a ciudades más sostenibles a través de la implementación de tecnologías de estacionamiento inteligentes, como sensores integrados en el pavimento con los que monitorear el estado de la plaza o softwares de detección basado en el procesado de imágenes captadas en tiempo real por cámaras, han demostrado ser iniciativas eficientes a corto plazo que ayudan a abordar tanto estos problemas como a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Reducción del tráfico
Uno de los principales beneficios de las soluciones de guiado inteligente que además ayudan a la reducción de la contaminación ambiental es la disminución del tráfico urbano. Gracias a la información en tiempo real que estos sistemas proporcionan, los conductores pueden localizar con rapidez las plazas de estacionamiento disponibles en la zona para dirigirse directamente a ellas. Esta solución ayuda a reducir la congestión del tráfico en las calles causada por las búsquedas prolongadas y, por tanto, minimizar la emisión de gases contaminantes consecuentes como el dióxido de carbono (CO2) y los óxidos de nitrógeno (NOx). Los conductores pueden acceder a la información de guiado a través de aplicaciones móviles o paneles de señalización situados en puntos estratégicos.
Según estudios realizados, aproximadamente un 30% de la circulación en áreas urbanas está compuesta por vehículos buscando una plaza de aparcamiento. El tiempo perdido y la energía consumida aumenta la frustración de los conductores al mismo tiempo que tiene un impacto negativo en la calidad del aire y, por tanto, contribuye tanto a la contaminación atmosférica como al cambio climático.
Además, al reducir la necesidad de que los conductores circulen en busca de espacios vacíos, los sistemas de estacionamiento inteligente ayudan a disminuir el riesgo de colisiones y atropellos debido a maniobras repentinas mientras los conductores buscan plaza. Este factor mejora la seguridad en los centros urbanos, transmitiendo tranquilidad tanto a los conductores como a los peatones.
Guiado de parking urbano
Eficiencia en el uso de las plazas
Los espacios de estacionamiento se han convertido en un recurso cada vez más escaso debido al crecimiento de la población en grandes ciudades y a la transformación de las áreas urbanas en entornos más sostenibles. Muchas están convirtiendo aparcamientos en zonas verdes, parques públicos, carriles bici y rutas para el transporte público, como respuesta a la preocupación por la contaminación ambiental y a la intención de llevar a cabo prácticas más responsables con el medio ambiente además de mejorar la calidad de vida de los habitantes.
Los algoritmos integrados en los sistemas de estacionamiento inteligente son capaces de optimizar el uso de las plazas disponibles en áreas urbanas, masificando la capacidad, al identificar patrones de usos y tendencias de movilidad que permiten una planificación urbana más sostenible y adaptada a las necesidades de la ciudad.
De esta solución se benefician tanto los conductores como los administradores. Entendiendo el uso que se le da a las zonas de aparcamiento, las autoridades pueden tomar decisiones informadas a la hora de asignar los recursos, como designar áreas para la carga y descarga o para personas con discapacidad, e implementar políticas de movilidad que permitan mejorar la fluidez del tráfico. También permiten identificar puntos de estacionamiento subutilizados que puedan transformarse en espacios más beneficiosas para la comunidad.
Estos sistemas también pueden ayudar a regular y controlar el uso de las plazas de aparcamiento, reduciendo el problema de la ocupación indebida de espacios y aumentando la rotación y disponibilidad de sitios libres. Este control del estacionamiento ayuda a crear entornos urbanos más ordenados y accesibles para los ciudadanos.
Promoción de transportes alternativos
Mediante el uso de zonas de aparcamiento disuasorias, los sistemas de estacionamiento inteligentes también promueven la movilidad sostenible en las ciudades incentivando el acceso al centro urbano sin la necesidad de utilizar el propio vehículo. Utilizando formas de transporte más ecológicas, como el transporte público o la bicicleta, estás áreas de parking ubicadas en la periferia ofrecen una conexión directa con el núcleo de la ciudad, evitando así la congestión del tráfico en las calles principales.
Los sistemas de estacionamiento inteligentes facilitan a los conductores llegar a los espacios libres con facilidad y rapidez. Además de reducir significativamente el tiempo dedicado a la búsqueda de aparcamiento, permite que disfruten de una experiencia de viaje más fluida.
El fomento de los transportes alternativos a través de estas áreas de parking disuasorio tiene un impacto positivo en el medio ambiente y la calidad de vida en la ciudad, reduciendo tanto la contaminación ambiental como acústica que suelen sufrir las calles principales.
En Urbiotica, sabemos que tecnologías avanzadas como las integradas en nuestros sistemas de estacionamiento inteligente pueden mejorar la calidad de vida de los habitantes de las grandes ciudades. Nuestras soluciones están diseñadas para adaptarse a las necesidades de cada urbe, promoviendo la movilidad sostenible y mejorando la calidad del aire en áreas urbanas al reducir la huella de carbono del centro urbano.
Gracias a su capacidad para reducir la congestión del tráfico causada por la búsqueda prolongada de aparcamiento, optimizar el uso de los espacios disponibles y promover el uso de transportes alternativos para acceder al centro de la ciudad, el estacionamiento inteligente ayuda a reducir la contaminación atmosférica y contribuye a la transformación de los grandes núcleos urbanos en entornos más limpios y saludables.
